La historia de Francia es una de las más influyentes de Europa y del mundo. Desde los pueblos celtas y galos hasta la actual república democrática, el territorio francés ha sido escenario de conquistas, revoluciones y transformaciones que marcaron la política, la cultura y la identidad de Occidente.
Francia en la antigüedad: de galos a romanos
Antes de convertirse en nación, el territorio francés estuvo habitado por celtas y galos. En el siglo I a.C., los romanos conquistaron la región e incorporaron la Galia al Imperio Romano. Durante siglos, esta provincia prosperó bajo el dominio romano hasta la caída del imperio en el siglo V.
La Edad Media y el nacimiento de Francia
Tras el derrumbe de Roma, tribus germánicas invadieron el territorio. Entre ellas, los francos consolidaron un reino que daría origen al nombre de Francia.
En 843 d.C., el Tratado de Verdún dividió el imperio carolingio, y de esa partición surgió la base del territorio francés actual. Con el tiempo, los reyes franceses expandieron sus dominios a través de conquistas, alianzas y matrimonios estratégicos.
La Guerra de los Cien Años (1337-1453) enfrentó a Francia con Inglaterra en una larga disputa territorial. Finalmente, Francia expulsó a los ingleses y consolidó su poder como reino centralizado.
La Revolución Francesa y el fin de la monarquía
En 1789, la Revolución Francesa transformó radicalmente el país. La monarquía fue abolida en 1792, dando paso a la Primera República Francesa. Este acontecimiento no solo cambió la política interna, sino que inspiró movimientos democráticos en toda Europa y América.
Francia en los siglos XIX y XX
Durante los siglos XIX y XX, Francia experimentó grandes cambios:
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La expansión colonial en África y Asia.
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Las dos guerras mundiales, en las que sufrió grandes pérdidas pero también jugó un papel decisivo en la victoria aliada.
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La reconstrucción política y social tras 1945.
En 1957, Francia se convirtió en uno de los miembros fundadores de la Unión Europea, reforzando su papel como potencia política y cultural.
Francia actual: democracia y proyección global
Hoy, Francia es una república democrática con gran influencia internacional. Su patrimonio cultural, su papel en la Unión Europea y su liderazgo en temas como diplomacia, arte, ciencia y gastronomía hacen del país un referente mundial.
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